
Esto es algo que escribí allá por el 2018... lo dejo por acá por si quieren leerlo
La historia ha demostrado, para bien o mal, que esto de la neutralidad tienen tantas puntas como opiniones y que lo que fue bueno ayer no lo es hoy y lo que se creía maduro no estaba para nada maduro... prueba de ello es que -el país que inventó lo de neutralidad de red- fue el que dio recientemente de baja, o prácticamente de baja su normativa al respecto. Puede que esto sea errado... o puede que no.
Yo creo que hay que ver el tema como un todo (el bosque y no los árboles).
Mi opinión personal sobre si el "ofrecer servicios a algunos y no a otros" como una de las posibles definiciones de no neutralidad, creo que está mal. Creo que desde ese punto de vista, si existe una normativa al respecto, lo que debe establecer es la no discriminación de unos frente a otros. Pero otro tema es que existan diferentes planes para algunos que requieren características de tráfico que otros no requieren.
Si nos ponemos un poco formales, esto de perfiles de trafico (algo que puede ser tildado de no neutral) siempre fue así en el pasado. Sobre todo cuando las redes de acceso eran -lentas-. Claro, hoy como en nuestra realidad de Uruguay tenemos un ancho de banda "de la masita" (en promedio y no en promedio porque hasta un Universal Hogares anda volando y es gratis) damos por asegurada cierta velocidad y pedimos más y más sobre esa base... pero hagamos memoria de cuando esa velocidad de la que hoy gozamos era una mera ilusión, un sueño. Hagamos memoria de cuando luego de 4 horas de usar el -teléfono- para baja un jueguito discando 09091234 o 11133 alguien de nuestra casa -levantaba el tubo- y nos queríamos matar porque había que arrancar todo de cero...
Mi versión de la historia para quién desee leerla
Mi opinión al respecto de la mayoría de las definiciones de neutralidad de red es bastante disrruptiva. Yo creo que la neutralidad nunca tuvo que ver con el usuario final sino que siempre fue un problema entre operadores de transporte (o acceso a Internet) y proveedores de contenido... una batalla (o guerra) que entablaron unos con otros producto del avance en la conquista que realizaron los unos sobre los otros y producto de la creciente demanda de infraestructura (impulsada por las aplicaciones de video principalmente) y producto también de que las ganancias se comenzaron a mover del tránsito o acceso al consumo de contenidos.
Entonces, creo yo, llego el punto en que algunos proveedores de contenidos hicieron una de las jugadas marketineras más grandes de la historia de Internet (esto es mi -teatralización- de los hechos claro está) que fue convencer a los -usuarios- y algunas organizaciones sin fines de lucro de pelear una guerra que no era de ellos a la que llamaron -neutralidad de red-... y lo lograron.
Lo lograron en parte porque también los ISP o proveedores de tránsito o acceso, en lugar de buscar acuerdos con los proveedores de contenidos para crear situaciones de Win-Win, pretendieron cobrarle a los usuarios (como lo hacen desde el principio de la historia de Internet) y también cobrarle a los proveedores de contenido en el entendido de que ellos también son usuarios.
Y yo concuerdo con que ellos también son usuarios... pero el problema en ese punto se reduce a quién -es más grande- y en este caso, los peces gordos en el mundo de Internet ya hacía tiempo que eran los proveedores de contenidos. Un mundo en el que los ISP comenzaban a perder mercado pues entre otras cosas nadie ya prácticamente llamaba por teléfono, nadie mandaba SMSs y el mero acceso a Internet comenzaba más y más a ser un commodity con cada vez menos margen de ganancia si no se le agrega valor.
En otras palabras el dinero que antes estaba en la cantidad de bytes que pasaban por el cable, ahora está en los contenidos.
Y ¿cómo termina esto? Yo que se... siempre creí y lo sigo haciendo, que la solución va por la vía de los acuerdos entre unos y otros proveedores (acceso por un lado y contenidos por otro) y en buscar relaciones de negocio en la que unos brinden servicios a otros y todos brinden servicios a los usuarios finales de forma que todos puedan subsistir y continuar en cada uno en su parte del negocio. Tampoco creo en la -acaparación- del negocio por completo por los -monstruos- de Internet, pues ello indefectiblemente a la larga termina mal para todos (la historia también lo ha demostrado una y otra vez). Por desgracia la codicia del ser humano no conoce límites.
Entonces ¿creo en la neutralidad de red? Bueno, primero tendríamos que definir que es exactamente y luego vemos...
Creo si, en la igualdad de ofertas y no discriminación, para todos.
No creo en que los operadores de redes no puedan manejar la forma en que los datos fluyen en sus redes, porque pretender eso es simplemente una utopía.
No creo en que los únicos que no son neutrales sean los operadores de transporte porque quienes manejan los contenidos ponen -donde quieren- el contenido que quieren... y nadie habla de neutralidad en ese sentido. Nadie habla del por que puedo ver una película en Uruguay que no puedo ver en Brasil o en USA o donde quiera si estoy pagando por ello. Nadie habla de que pago un servicio -global- que no es igualitario en todo el mundo y que depende desde qué sitio estoy accediendo. Nadie habla de por qué si consumo un servicio en Uruguay pago impuestos en California o de por qué los derechos para visualizar contenidos no son algo global a esta altura de la historia y van variando dependiendo de dónde me encuentro... y suma y sigue.
Creo que es un tema muy amplio, con muchas aristas y del que recién estamos empezando a ver las bondades y las cosas no tan buenas... y del que aún hay mucho que debatir (en el mejor sentido de la palabra) para buscar las mejores soluciones a estos nuevos problemas que surgen.
Lo peor que podemos hacer es aplicar soluciones viejas a problemas nuevos solo porque somos lo suficientemente vagos como para ponerle -pienso- a estas cuestiones.
Y lo otro peor que podemos hacer es creer tener una solución y buscar problemas a los cuales aplicarle la misma.